Llevo doce noches en vela
tratando de verte más allá del negro de tu sombra.
Y el día te devuelve como muralla altiva;
soberbia, indiferente,
..............mágica.
Llevo desde el viernes intentando pintarte
y el color se atraganta entre mis ojos.
Cambias tanto que dudo si eres sabia,
si callas un sueño eterno o si lloras
desde tu cresta hirsuta.
Y ahora vuelo
sobre el océano vegetal que nos separa,
te abrazo en la madrugada, desnudo.
Hago las maletas y prometo regresar.
No siempre sabio,
sin ser tu dueño, seguiré mirando
hasta desvelar, piedra a piedra,
el antiguo secreto de tu fuerza.
13 comentarios:
¡Qué bien, ya te puedo seguir! Ahora no te vas a librar de mí ni con agua caliente.
Preciosa canción para ilustrar tu pasión por la roca inalcanzable.
Nos vemos mañana ¿no? Pues cuenta con esa copa que te debo.
Besos
Es Vedrá, parte de ese triángulo del silencio, donde las palomas mensajeras pierden el sentido de la orientación...
Parte de ese silencio que te hace sentir y escribir algo tan hermoso.
Me gusta esta nueva forma de pintar tuya.
Un beso
"no siempre sabio, sin ser tu dueño, seguiré mirando hasta desvelar, piedra a piedra, el antiguo secreto de tu fuerza "
Caray, Manuel, qué cosas escribes más bonitas...y que dan que pensar.
Un abrazo.
Port
Hermoso poema donde intentas desentrañar la fuerza y el secreto de la montaña. Dificil cometido.
Un saludo cordial
Bueno, el otro día quise dejarte un comentario pero se me borró, asi que te lo dejo ahora. Me encanta tu manera de "pintarnos" el paisaje, siento la fuerza que hay detrás de todo esto, espero que te sientas satisfecho con el resultado porque es genial.
Un beso grande, de vuelta ya...
Manuel, compartimos muchas miradas y esta, no podía ser de otra manera, también. Parece mentira que algo aparentemente inerte despierte tanta atracción. Es difícil plasmarlo...pero, por lo menos en palabras, lo has conseguido.
Sigue caminando tras su misterio. Espero que no lo descubras. Lo mejor: la búsqueda.
Besos y abrazos.
Ana, Es Vedrá es solo un peldaño. La roca es tanto como el silencio. Quizá algo más elocuente.
Yo llevo toda una vida en esas tareas, así que no me voy a bajar ahora.
Rosa, yo no he visto perderse a las palomas... salvo en ocasiones.
Los mitos urbanos me interesan poco. La magnificencia de las formas naturales me importan mucho más.
Y nuestra roca, como sabes, nos está hablando desde hace ya algunos años.
Otra cosa es que nos mostremos sordos.
Querido Emilio: Es Vedrá y yo mantenemos un "ten con ten". Ambos somos del mismo género. Ambos somo antiguos, más allá de donde podamos mirar. Ambos vamos conociendo nuestras fuerzas.
En el amor no debe habar vencedores ni vencidos (Siddharta). eso lo tengo claro.
Yo busaré sus secretos como él busca el mío.
Carmela, gracias por visitarme.
No se si el cometido es fácil o dificil. En todo caso no busco lo fácil.
Pero ella es hermosa, ¿verdad?.
Pilar, cuando esté terminado el cuado, prometo escanearlo y ponerlo en esta página.
De momento está en embrión.
Besitos.
Nunca una montaña como Es Vedrá puede ser inerte. Si la conocieses lo sabrías, Mª Carmen.
Yo sigo mi camino que es el del conocimiento, a veces amabale, otras áspero, siemrpe fructífero.
Un beso.
El misterio de Es Vedrá, "es verda" Manuel. Quiero pensar que esas cosas no son accidentales y que esa montaña que ves desde tu casa encierra secretos que tu irás descifrándonos con versos como este...
Un beso grande.
Nines
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