Puedo imaginar ese árbol y su sombra preparada para una buena siesta. Pero confieso que no se muy bien lo que quieres contarnos. Serán estos calores que aplatanan y no dejan pensar...
En fin, aun así me dejas la sombra de la calma. Un beso enorme!!
Nos contaba Santiago esta tarde-noche, cuando hemos acabado el acto de la presentación en la AEAE del Autobús 538, que uno de los blogs que más entradas tiene es el tuyo. No es extraño. Porque tienes un amplio espectro creador. Te mueves bien en los aires, en los mares, y en la tierra (veáse esta entrada)...pero donde te mueves mejor es en los sueños (veáse esta entrada tambien). Y eso que tus sueños, como los míos, suelen ser a deshora. Por eso ( a mi me ocurre ) son más raros. Lo que no cabe duda es que los sueños empujan la escritura. Siempre que no se olviden. Lo que quieran decir...no es tan importante. Sí lo que te digan a tí...y lo que nos digan a cada uno. Vamos a ver cómo me pongo en contacto con esta hormiga...hasta que se ahogue en tu charca. Un abrazo Manuel.
Perdón...pero, como de repente, saltan cosas, aunque -este no sea tu blog, Pilar, pero como es de la "family" decirte que eso de "me dejas la sombra de la calma" es, literaria y vitalmente ( qué bueno poder hablar de confluencia de ambos planos) magnífico. Gran hallazgo.
Manuel, no sé si es peor pasar las noches en blanco, dando vueltas, sin dar descanso a las dudas y preocupaciones o, caer en un sueño arrastrándolas...Lastima que la mayoría de las veces sea más fácil ver el reflejo de nuestra realidad en los sueños, que ver el reflejo de nuestros sueños en la realidad...De todas las formas, conseguir amparo y cobijo en un árbol, ya es mucho.
Sueñas con hormigas como Silvio con serpientes, como Kafka con Gregorio Samsa y sus cucarachas.
Las hormigas trabajan pero también adoran el sol, yo creo que por las noches hacen grandes fiestas, allá abajo en lo profundo de su hormiguero. Tal vez tengan el reloj del equilibrio abordando todas las facetas de la vida, tal vez por eso es el animal que proporcionalmente tiene la cabeza más grande del mundo, si miramos su cuerpecito lo entenderemos.
Son también los animales más fuertes del planeta ya que transportan alimentos que pesan muchas veces su propio peso.
Las hormigas son bellas en blanco y negro y se dibujan solas en las hojas en blanco.
Me gustan sus patas largas, finas y resistentes, su contoneo de caderas es una magia propia de bailarinas, que sin duda conocen los secretos de la danza colectiva, en fila india son toda una gran coreografía.
Recuerdo que mis hormigas favoritas eran las que me salvaban del hastío de las siestas de verano en mi infancia, cuando el sueño no tenía sentido a esas horas.
hormigas de papel y tiempo, gracias por recordarmelas en este insomnio inoportuno.
Oye, Manuel, cielo ¿por qué tu blog no tiene la opción de "Seguir"? Facilita mucho las cosas porque avisa cuando has colgado una entrada nueva. Mira a ver si...
Querida Mª Carmen, soñar realidades o vivir sueños?. Yo soy algo ordenado, sin pasarme. Así que prefiero mi mundo de sueños y mi andadura en la realidad como componente alimenticio.
Mis hormigas son sueños; eso creo que está claro.
Lo demás... ¿quien sabe a qué reino pertenece el resto?.
13 comentarios:
Puedo imaginar ese árbol y su sombra preparada para una buena siesta. Pero confieso que no se muy bien lo que quieres contarnos. Serán estos calores que aplatanan y no dejan pensar...
En fin, aun así me dejas la sombra de la calma. Un beso enorme!!
Nos contaba Santiago esta tarde-noche, cuando hemos acabado el acto de la presentación en la AEAE del Autobús 538, que uno de los blogs que más entradas tiene es el tuyo. No es extraño. Porque tienes un amplio espectro creador. Te mueves bien en los aires, en los mares, y en la tierra (veáse esta entrada)...pero donde te mueves mejor es en los sueños (veáse esta entrada tambien). Y eso que tus sueños, como los míos, suelen ser a deshora. Por eso ( a mi me ocurre ) son más raros.
Lo que no cabe duda es que los sueños empujan la escritura.
Siempre que no se olviden.
Lo que quieran decir...no es tan importante. Sí lo que te digan a tí...y lo que nos digan a cada uno.
Vamos a ver cómo me pongo en contacto con esta hormiga...hasta que se ahogue en tu charca.
Un abrazo Manuel.
Perdón...pero, como de repente, saltan cosas, aunque -este no sea tu blog, Pilar, pero como es de la "family" decirte que eso de "me dejas la sombra de la calma" es, literaria y vitalmente ( qué bueno poder hablar de confluencia de ambos planos) magnífico.
Gran hallazgo.
Port
Manuel, no sé si es peor pasar las noches en blanco, dando vueltas, sin dar descanso a las dudas y preocupaciones o, caer en un sueño arrastrándolas...Lastima que la mayoría de las veces sea más fácil ver el reflejo de nuestra realidad en los sueños, que ver el reflejo de nuestros sueños en la realidad...De todas las formas, conseguir amparo y cobijo en un árbol, ya es mucho.
Besos y abrazos.
Sueñas con hormigas como Silvio con serpientes, como Kafka con Gregorio Samsa y sus cucarachas.
Las hormigas trabajan pero también adoran el sol, yo creo que por las noches hacen grandes fiestas, allá abajo en lo profundo de su hormiguero. Tal vez tengan el reloj del equilibrio abordando todas las facetas de la vida, tal vez por eso es el animal que proporcionalmente tiene la cabeza más grande del mundo, si miramos su cuerpecito lo entenderemos.
Son también los animales más fuertes del planeta ya que transportan alimentos que pesan muchas veces su propio peso.
Las hormigas son bellas en blanco y negro y se dibujan solas en las hojas en blanco.
Me gustan sus patas largas, finas y resistentes, su contoneo de caderas es una magia propia de bailarinas, que sin duda conocen los secretos de la danza colectiva, en fila india son toda una gran coreografía.
Recuerdo que mis hormigas favoritas eran las que me salvaban del hastío de las siestas de verano en mi infancia, cuando el sueño no tenía sentido a esas horas.
hormigas de papel y tiempo, gracias por recordarmelas en este insomnio inoportuno.
Besos
Nel
"Lo sé porque acabo de soñarlo".
¿Puede haber razón más convincente?
Oye, Manuel, cielo ¿por qué tu blog no tiene la opción de "Seguir"? Facilita mucho las cosas porque avisa cuando has colgado una entrada nueva. Mira a ver si...
Besazos
Nada mejor que entregarse al sueño para encontrar la verdadera lucidez.
Un hermoso poema. Felicidades.
Pilar, muchas veces me siento como esa hormiga, garrapateando cosas con las patitas que se mueven por encima del vértigo de un folio en blanco.
Así me siento y así lo escribo.
Y esa es mi duda.
Ya muy pronto nos vemos. Un beso.
Emilio, querido Emilio, ya sabes que "el sueño de la razón engendra mostruos".
Así son muchas de mis noches: generadoras de estos pequeños monstruos-hormigas que van tejiendo cosas con su andar.
Querida Mª Carmen, soñar realidades o vivir sueños?. Yo soy algo ordenado, sin pasarme. Así que prefiero mi mundo de sueños y mi andadura en la realidad como componente alimenticio.
Mis hormigas son sueños; eso creo que está claro.
Lo demás... ¿quien sabe a qué reino pertenece el resto?.
Un beso.
Vera, gracias por llevarme de la mano a esas tardes tórridas de agosto, con hormigas incansables y sueños adolescentes.
Asi son ellas y yo.
Es como el temblor de un beso deseado que no recuerdo si tuve.
Ana, yo creo que en esto de Blogspot siempre te marca las actualizaciones. Pero trataré de mejorarlo. Ni idea de cómo hacerlo.
Y nos vemos ya mismo, que me debes dos besos y una copa.
Querida Sacra: gracias por tu visita.
Ya me gustaria saber plasmar mis sueños en poemas. Solo consigo unos ciertos apuntes que se aproximan a lo que quiero decir.
Seré paciente, lo prometo. Y trabajador también.
Un beso.
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