Sobre
esta casa se alza la distancia
que
separa tu rumbo de mi nombre.
Allano
tu camino,
esparzo
mi simiente derramada en los árboles
sin
gritarle a tu ausencia.
Desgasto
el brillo de los ojos
apartando
las piedras por la noche
vaya
a ser que tropieces si regresas.
Pero
solo consigo
vencerme
al sueño el día entero;
darme
de bruces
contra
un nuevo crepúsculo
si
algún ruido me abre los ojos
y,
desvelado
presintiendo
tu olor,
me
acerco hasta la puerta
para
ver si has venido.
18 comentarios:
"...apartando las piedras por la noche..." Así es el amor. Luego te das de bruces:)
Una poesía auténtica, de esas que te llegan sin disfraces.
Un saludito.
Qué bello retrato de amor al ausente. La espera se dilata en esos días que no llegan hasta rendir al cuerpo para reportarnos otro día de esperanza... Me gusta, Manuel. Gracias por compartirlo
¡Este si que es de los mios! Un poema de amor precioso. Enhorabuena.
Un besito.
Llegar a casa, abrir tu blog y leer este poema.. no tiene precio. Para lo demás.. Master Card..
Besos y gracias, me encanta..
Querido Manuel, con fantasmas o sin ellos, lo que no hay duda es que has encontrado la palabra justa que cuenta lo que piensas y se hace ritmo. Solo hace falta leer tus últimos poemas o estos versos que me encontrado esta tarde.
Me voy silenciosa, no quiero hacer ruido y romper este bello momento. Precioso, y la fotografía...Muy hermosa.
Besos y un fuerte abrazo.
Cuanto nombre tiene este poema, querido amigo. Cuanta flor...
Al regreso le llueven versos..
Un saludo Manuel
Querida Carmen: aún siendo un amante de la soledad, a veces, esta, pesa.
Por eso uno procura dejar la casa limpia y acogedora, por si a ella le gustase, viniese, y se quedara para siempre.
Y así pasa la vida.
Un beso.
Gracias tí, Laura, por leerme y comentar. Ya sabes que esta casa está abierta para tí siempre.
Besos.
¡Si lo sabía yo, Mila!.
Cuando escribí el poema, enseguida me dije: este le usta a mi Mila.
Y mira si tenía razón.
Que nos veamos pronto, eh?. Un beso.
Con lo que me dices, Carmen, no se si pedirte una Visa oro o poner un poema cada día, para cuando llegues a casa.
Querida Mª Carmen: el poema, vaya, ahí está.
La foto tiene su historia. Ya sabes que ella es Rosa y esa roca de enfrente es "Es Vedrá", la piedra mágica de Ibiza.
Si, creo que es un bella fotografía.
Un beso.
El nombre de la Rosa no era un libro, Jesús?... ¡Ay!, que me he liao...
Un saludo Oréadas. Siempre es u n gusto verte por aqui.
Que bonito Manuel!! Toda una demostración de amor. No importa si esta lejos, tú vas a esperar, le vas hacer fácil la vuelta. Me encanta.
La próxima vez que nos veamos me lo recitas, tiene que ser la bomba.
Un abrazo
Jajaja... Pues claro que si, Nunci. Prometido ese "recitao".
Un beso.
Es un poema precioso mi vida. Me gustan tantos versos de él que no sabría con cuál quedarme, o sí... me quedo con tu poema completo para guardarlo en el mejor lugar de mi maleta mientras decide entrar de una vez al paro.
Gracias por poner mi foto a algo tan hermoso.
Un beso mi vida
Querido Manuel, no sé cómo se me ha podido pasar este poema.
Sencillo, tierno y hermoso.
Me ha encantado.
Besos
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